Mayo

 El mar

Veo el mar y me relajo. Siento que me tranquiliza. Las olas van y vienen, son como mis recuerdos, rehechos e inventados porque el transcurso de los años los borronearon. Agarro los caracoles de la orilla y pienso que cuando me vaya sentiré el mar en ellos- Observo los barcos a lo lejos, sé que van a otros países o pescaran mucho en sus viajes.

Hay surfistas en invierno en la playa Varese. El frio humedece mis ansias: debo esperar al verano para meterme.

Pero no me resisto, me saco las zapatillas y me meto. Me llegó hasta la cintura el agua y mis piernas están entumedecidas, mejor dicho están unidas. Miro hacia abajo y veo una cola de pez...¡¡¡Me transformé en sirena!!! Rio y nado, veo mi ropa rota flotando y nado hacia lo profundo. 

Me sumerjo. Es espectacular el fondo del mar. Algas, peces, rocas, barcos hundidos, orcas, delfines sonrientes que me besan.

 ¿será por poco tiempo esta transformación? 

No sé si pasan minutos, días, meses o años pero  si se que no deseo mis piernas de vuelta. Veo una botella vacía y con una hoja y lápiz de un bote roto, escribo mi historia y la meto en la botella que flota hacia la costa...